La radiación ultravioleta tiene un sinfín de aplicaciones en la industria, además de ser una de las soluciones germicidas más efectivas, es utilizada en muchos procesos de fabricación. Es por ello que para los fabricantes como Construlita, es esencial conocer con detalle la naturaleza de este tipo de emisiones así como los niveles de absorción de materiales como los plásticos.

La tecnología UV tiene un amplio rango de aplicación, algunas de las industrias que aprovechan este tipo de radiación son los adhesivos, los desarrollos aeroespaciales, los recubrimientos y pinturas, los acabados textiles, la fabricación de polímeros reforzados (composites), los cosméticos, los materiales geosintéticos los, esmaltes, el equipamiento médico, los materiales ópticos, la farmaceútica, la purificación de agua, los materiales ferroviarios, los productos de tecnología solar y los equipos deportivo. Ahora te has dado cuenta que la radiación UV está en todo lo que nos rodea.

Con el paso del tiempo, todos los materiales sufren un nivel de degradación, es decir, la pérdida o disminución de algunas propiedades. La luz natural y la radiación UV, por ejemplo, degradan la mayoría de los plásticos, es por ello que se utilizan componentes estabilizadores que absorben el proceso de fotodegradación y disminuyen el daño sobre la estructura del plástico. Estos aditivos toman la radiación ultravioleta y la disipan en forma de calor. 

Los materiales y equipos expuestos a radiación UV natural o artificial deben diseñarse y fabricarse considerando este tipo de aditivos estabilizadores que protegen el producto, el entorno y sobre todo a las personas que lo utilizan.

Estas mismas consideraciones deben tenerse en cuenta en dispositivos de luz visible LED y otras fuentes de radiación UV. Para asegurar la operación adecuada de un producto UV-C se requiere inhibir la degradación para mantener las propiedades mecánicas tales como resistencia, elasticidad y dureza. En algunos casos, los aditivos se cambian por películas o nanopartículas que estabilizan e inhiben la degradación del material.

Existen cuatro criterios principales relacionadas con la salud y la seguridad para determinar la estabilización UV:

• Control de sustancias tóxicas.
• Efectos carcinogénicos.
• Niveles de exposición.
• Regulación para productos alimenticios.

Si estás interesado en conocer los aspectos de estabilización y degradación de polímeros y su relación con la emisión UV te recomendamos consultar la tercera edición del Handbook of UV Degradation and Stabilization, donde encontrarás una referencia detallada de cómo los organismos vivos se protegen de este tipo de radiación.